Abstracto azulado
Utilidad de la prensa diaria (1)
Un señor toma el tranvía después de comprar el diario y ponérselo bajo el brazo.
Media hora mas tarde desciende con el mismo diario bajo el mismo brazo.
Pero ya no es el mismo diario, ahora es un montón de hojas impresas que el señor abandona en un banco del parque.
Apenas queda solo en el banco,
el montón de hojas impresas se convierte otra vez en diario,
hasta que un muchacho lo ve, lo lee y lo deja convertido en un montón de hojas impresas.
Apenas queda solo en el banco, el motón de hojas impresas se convierte otra vez en un diario, hasta que una señora lo encuentra, lo lee y lo deja convertido en un montón de hojas impresas.
Luego se lo lleva a su casa y lo usa para limpiar los cristales de las ventanas,
que es para lo que sirven los diarios después de estas excitantes metamorfosis.
Rico&Nuño.- Taller de Arte ALTEA 